Durante el primer semestre de 2024, estudiantes de la carrera de Dibujante Proyectista de la UTEM enfrentarn en la asignatura de Dibujo Técnico I el desafío de crear un mostrador desmontable y portátil para Fulanas Gourmet, emprendimiento de salsas y productos gourmet veganos y naturales de la comuna de Ñuñoa.

La docente Francisca Salas Fuente es quien encabeza la cátedra y comenta que el objetivo principal de la iniciativa es “vincular las unidades temáticas de la asignatura con el desarrollo de un proyecto real, promoviendo un aprendizaje centrado en el estudiantado, con didácticas de aprendizaje activo, desarrollo de competencias y vinculado con el medio local, lineamiento de nuestro modelo educativo UTEM”.

Se trata de la primera actividad de este tipo en la carrera de Dibujante Proyectista. “Surge como una manera de explorar nuevas formas de aprendizaje con estudiantes en el inicio de su vida universitaria. El nexo con Paulina Vásquez, emprendedora de Fulanas Gourment, surge desde la idea de desarrollar un proyecto que fuese en beneficio para ambas partes, identificando una problemática de exhibidores más prácticos y adaptables a sus necesidades, con características puntuales desmontables, apilables y portátiles”, agrega la profesora.

Las unidades de la UTEM que fueron un apoyo fundamental para realizar la actividad fueron: Vinculación con el Medio en Docencia, la coordinación de la carrera a través de su jefe, Marcelo Borges Quintanilla; el operador de laboratorios de técnicas gráficas, Daniel Becker; y el centro de estudiantes de la carrera.

El proceso de creación de los prototipos

La estructura del proyecto comenzó con reunión con el equipo de asesores, estudiantes de segundo año de la carrera, quienes fueron fundamentales en el desarrollo de las distintas etapas del proyecto, ellos realizaron un acompañamiento dentro y fuera del aula aportando con sus competencias disciplinarias y sociales para cada uno de los equipos. “Destaco a Gustavo Morales, Joshua Cruz y Pablo Vásquez, ellos fueron esenciales en el proceso”, comenta la académica.

Las etapas de ejecución del proyecto incluyeron una salida a terreno al Taller de Mobiliario, en donde las y los estudiantes de primer año conocieron las especificaciones técnicas del material con el cual se construiría su prototipo, las herramientas tecnológicas de corte utilizadas en el mercado y la pertinencia que lo que ellas/os dibujan se puede construir.

“Posteriormente, nos reunimos con Paulina Vásquez, las y los estudiantes conocimos la problemática a solucionar, el producto, las actividades relevantes y los medios de exposición físicas de promoción de la clienta”, indica Francisca Salas Fuente.

Los siguientes pasos englobaron el desarrollo de las ideas, la elaboración de planos de conjunto, despiece y modelo de trabajo del proyecto, así como la difusión de los proyectos. “De esta manera, las y los alumnas/os presentaron sus trabajos en formato de exposición de planos y maquetas de prototipos, fabricadas con cartón reciclado. Todo esto frente a la emprendedora, la cual realizó una simulación con sus productos en cada uno de los proyectos, para tomar la decisión de cuál sería el ganador”, explica Salas Fuente.

Interpretar las ideas del cliente

Entre las y los equipos que se presentaron, destacaron: Equipo Regla T, compuesto por Aghata Bravo y Vicente Quintana; equipo Risueño, de Martina Macaya y Nataly Pérez, equipo Súper Team, de Vicente Jara; equipo Estrellita, de Tania Badilla y Valentina Rojas; y equipo Alquimista de Papel, de Axel Gómez y Nicolás Rojas.

Estos últimos resultados ganadores. “El mayor desafío para mí fue diseñar un modelo innovador y cumplir con las expectativas de la emprendedora. Para ello nos basamos en modelos ya hechos y creamos varios prototipos, logrando así la versión final que era de fácil ensamblaje y transportable”, comenta Áxel Gómez.

Nicolás Rojas añade que “creo que lo más destacable de este proyecto es el tema del equilibrio, la funcionalidad y creatividad, el interpretar las ideas del cliente y adaptar las ideas para cumplir con los objetivos del proyecto”.

“Con todo esto, las y los estudiantes potenciaron las siguientes habilidades: Trabajo colaborativo, escucha activa, resolución de problemas, organización, compromiso, investigación, análisis, creatividad, espacialidad, trazado, composición y prototipado”, destaca la académica responsable del curso.