“Este es un plan de una relevancia incuantificable. Si lo tuviese que describir en pocas palabras, refleja el sello de la modernización de los procesos académicos y una proyección del Campus Ñuñoa, del área tecnológica, de la sustentabilidad y la responsabilidad social”, destaca la rectora UTEM Marisol Durán Santis, quien encabezó este 8 de agosto la presentación de los progresos del Plan Maestro para esta instancia de nuestra casa de estudios.

La actividad, realizada en la Biblioteca Ximena Sánchez Staforelli, estuvo liderada por la máxima autoridad institucional, junto a Jorge Marsino Prado, director de Marsino Arquitectura; y María Inés Buzzoni Garnham, socia de la misma firma de arquitectura; quienes presentaron a autoridades, docentes y representantes de la comunidad universitaria el detalle de este proyecto que acaba de obtener su permiso de edificación.

El plan contempla diversas etapas que incluyen estacionamientos vehiculares y de bicicletas, ascensores, la renovación del Servicio de Salud Estudiantil (SESAES), áreas verdes, terraza y diversas áreas comunes. Al respecto Jorge Marsino Prado, destaca que “el campus que estamos pensando no existe en Chile y probablemente tampoco en América Latina, está totalmente a la vanguardia”.

Dentro de sus características destaca que es un edificio que se abre a la comunidad e invita a ser recorrido. “En ese sentido, la identidad histórica de ser universidad pública se va a amplificar con este proyecto. Además, su estructura es soft tech, es decir de bajo consumo de energía, de altas prestaciones y confort. Esto habla de nuevos aires y perspectivas de futuro”, comenta Marsino Prado.

Fortaleciendo la comunidad universitaria

“Este proyecto se hace cargo del espacio, de los recursos existentes e incorpora además el concepto de la sustentabilidad de espacios para fortalecer el proceso de enseñanza y aprendizaje, e inclusión, que integran el proceso de nuestras/os docentes y estudiantes e investigadoras/es que son parte de las Facultades de Ingeniería y Ciencias Naturales, Matemática y del Medio Ambiente, que componen este campus en particular”, destaca la rectora Durán Santis.

María Francisca Valenzuela Rasmussen, jefa de proyecto en Marsino Arquitectura, indica que “el plan maestro incluye innovaciones desde distintos ámbitos, como la incorporación de áreas verdes, la circulación continúa, tanto del nuevo edificio como de los ya existentes. Además, se incorporan aulas que acogen distintos conceptos en cuanto a la educación: Escaladas, multiuso, tipo auditorio, grandes y pequeñas, iluminadas, pero a la vez con un control natural de la radiación”.

Asimismo, señala que “todas las instalaciones permiten distintos tipos de uso, tienen acondicionamiento acústico y es importante destacar las áreas de recreación, que están concebidas como espacios de circulación, conversatorios y estar. La idea es potenciar la accesibilidad y la relación entre los distintos actores universitarios”.

Este avance en el desarrollo del Campus Ñuñoa representa un paso significativo en la transformación de la UTEM y su impacto en la comunidad universitaria.